Alberto Plaza Ahora esa Mujer
Entre llanto y sonrisas irrumpió la vida 
haciéndoles creer que les pertenecía; 
llenando de ilusiones esos dos futuros, 
¡Qué más podían pedir! 
Comenzaba el desafío que los años 
van dejando pronto en el olvido; 
los desvelos y todas las rebeldías 
que hubo que asumir. 
  
Y aunque duele ver en el espejo 
lo que en el calendario no se ve, 
es más duro el paso de los años 
cuando la niña es toda una mujer. 
  
Y ahora esa mujer, esa mujer, 
esa que vieron crecer, llorar ayer; 
ha levantado la vista y ha empezado a andar; 
ha despertado del sueño y quiere libertad; 
ha comenzado a volar, 
ha comenzado a volar, 
ahora esa mujer. 
  
Entre llanto y sonrisas irrumpió la vida 
haciéndoles creer que les pertenecía; 
llenando de ilusiones esos dos futuros, 
¡Qué más podían pedir! 
  
Y aunque duele ver en el espejo 
lo que en el calendario no se ve, 
es más duro el paso de los años 
cuando la niña es toda una mujer. 
  
Y ahora esa mujer, esa mujer, 
esa que vieron crecer, llorar ayer; 
ha levantado la vista y ha empezado a andar; 
ha despertado del sueño y quiere libertad; 
ha comenzado a volar, 
ha comenzado a volar, 
ahora esa mujer.
Y ahora esa mujer, esa mujer, 
ha decidido vencer su timidez; 
ha levantado la vista y ha empezado a andar; 
ha despertado del sueño y quiere libertad; 
ha comenzado a volar, 
ha comenzado a volar, 
ahora esa mujer, 
ahora esa mujer. 

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